1. El minimalismo se torna austero con cortes limpios y sin adornos. Hablamos de abrigos sencillos y pantalones anchos y rectos, confeccionados con tejidos suaves y lisos que se llevan con un cinturón estrecho como único accesorio.
2. Nunca el glamour de épocas pasadas pareció tan actual. Se impone el estilo clásico y femenino de los años 40 y 50, con rebecas ceñidas y faldas amplias animadas por una bisutería llamativa y brillante.
3. Los años 70 siguen marcando tendencia aunque de un modo más elegante y maduro. Tonos cálidos y serenos como el coñac, el burdeos y el óxido estarán presentes en blusas y faldas a media pierna.
4. La revuelta juvenil de los 60 sigue causando furor con vestidos cortos y rectos, polos y pantalones ajustados en una llamativa gama de colores alegres y atrevidos.
5. Pon rumbo al Ártico e inspírate en la moda de los climas más fríos del planeta. Abrígate con varias capas de punto y culmina el look con una parka y botas de abrigo.
6. Ornamentada y suntuosa, nuestra mirada se dirige hacia los años 20 en busca de inspiración. Tejidos propios de la moda de tocador, como la seda georgette o el satén, nos permiten crear originales diseños drapeados en chaquetas y vestidos.